Todos entendemos el significado del término «el tiempo es dinero». Cada vez que desperdiciamos tiempo, perdemos la oportunidad de usarla para hacer algo que valga la pena, sin embargo, aunque se diga poco, la misma frase en dirección contraria también es cierta: “el dinero es el tiempo” y esa percepción puede mostrar la gran contribución del dinero a la conquista de la felicidad.
Hablé mucho sobre esto en el artículo «el dinero compra felicidad», pero quiero explorar otro punto de vista en este nuevo artículo.
¿Por qué trabajamos para ganar dinero?
¿Cuál es el objetivo principal de nuestro trabajo? Sencillo, ganar dinero para apoyarnos a nosotros mismos. Cada uno de nosotros necesita una cierta cantidad de cosas por las que vivir. Estamos obligados a producir (directa o indirectamente) lo que necesitamos para sobrevivir, cuanto más fácil es este proceso productivo, y cuanto menos esfuerzo y energía necesite para ser ejecutado, mejor.
De esta manera tendrás más tiempo libre para dedicarte a actividades más agradables, cuanto más se haya producido hasta entonces (en otras palabras, cuanto más riqueza haya acumulado), menos tendrá que producir en el futuro.
Y cuanto más productivo seas, más gratificante será este trabajo.
Sin dinero, una persona debe concentrarse en esas tareas obligatorias día tras día, independientemente de ser placenteras o no.
Con el dinero, una persona puede elegir lo que le gusta hacer y dedicarse más a lo que realmente le gusta.
El dinero te permite personalizar tu rutina (desayunar en la panadería preferida en lugar de prepararte comida en casa, comprarte un coche en lugar de montarse en un autobús, trabajar como escritor en lugar de cualquier trabajo aburrido, etc.).
En resumen, el dinero aumenta tu autonomía. Cuanto mayor sea tu independencia sobre tus actividades diarias, mayor será tu control sobre tu rutina. Por esta razón, la autonomía es la base de tu felicidad.
Aumentar la productividad puede aumentar su felicidad
Imaginemos ahora lo siguiente:
Supongamos que John necesita trabajar 8 horas al día para ganar suficiente dinero para mantener el nivel de vida de su familia (vivienda, comida, ropa, entretenimiento.
Ahora suponga, que John ha decidido aumentar su productividad, ahora él necesita trabajar solamente 6 horas al día para recibir la misma cantidad de dinero. ¿Qué pasa con estas 2 horas extras?
John hará lo que desee con ese tiempo libre extra. Pero ese es el punto y ese es el valor de la riqueza.
Esas horas se pueden utilizar en la manera que mejor le parezca. Ya no necesita trabajar durante 8 horas para mantener su nivel de vida.
Él puede incluso aumentar aún más su productividad, con el fin de ganar más y aumentar su nivel de vida, si así lo quisiera, pero también puede usar estas horas para buscar otros tipos de recompensas: jugar con sus hijos, ver una película, quedarse con su esposa, escribir, leer, correr, pintar.
Incluso puede dedicarse a otro tipo de trabajo que encuentre más gratificante ya sea tomando un curso, estudiando una carrera universitaria o incluso enviar currículums a otras empresas.
Puedes hacer lo que creas que es más importante para tu felicidad. Una gran parte de tu tiempo se ve beneficiada gracias al aumento de tu productividad.
En ese caso, más dinero significa más tiempo y más tiempo para dedicar a tu bienestar te permite vivir más feliz.
Ser más productivo aumenta tus opciones. Te permite ganar más y comprar más, pero también te permite ganar lo mismo trabajando menos.
El poder del dinero puede expandir nuestras opciones. Es una gran herramienta para la contribución a la felicidad. Un determinado individuo puede preferir pasar su vida como pintor, pero no puede mantener un nivel aceptable de vida con sus pinturas. Sin embargo si decide ser más productivo ese panorama puede ser diferente.
Un académico puede preferir utilizar su tiempo más en la investigación que la enseñanza; Invertir dinero para aumentar la productividad, aumenta esa posibilidad.
Una persona puede preferir pasar más tiempo con sus hijos mientras todavía son bebes; producir más dinero aumenta esa posibilidad.
Cada uno de estos ejemplos deja claro que el dinero es importante no sólo para suplir necesidades físicas o materiales. También es muy importante para la gama de varios valores espirituales.
El dinero no se trata sólo de comprar cosas. Permite la conquista de valores tanto espirituales como materiales.
¿El trabajo siempre tiene que ser aburrido?
Es importante dejar claro que no se debe menospreciar el valor de nuestro trabajo ni el tiempo que utilizamos para trabajar.
Su trabajo no necesariamente tiene que ser algo aburrido y que sólo sirva para pagar sus facturas al final del mes. Muchas cosas que valoramos se pueden lograr como resultado de nuestro trabajo, por ejemplo.
Trabajar solo, puede ser una de las cosas más gratificantes para muchas personas.
Además, se puede crear mucho más valor mientras se trabaja, desarrollando productos o servicios que realmente cambien la vida de las personas que las usan.
Usted puede diseñar y construir puentes, tratar enfermedades, enseñar educación financiera, dirigir una película, escribir un libro. Todas estas cosas las puedes hacer tu mismo, y así trabajar solo.
Varias de estas cosas pueden ser para ti muy gratificantes.
No es de extrañar que tantas personas que llegan a la riqueza, hoy en día sigan trabajando como por ejemplo, Warren Buffett, Jorge Paulo Lemann.
El dinero compra bienes materiales que son prerrequisitos para la felicidad y el dinero compra tiempo para ir después de cualquier meta espiritual que crees que es esencial para tu felicidad. El dinero permite a cualquiera alcanzar sus valores principales. Y la conquista de estos valores es el camino a la felicidad.
Conclusión
La riqueza que cualquier persona pueda adquirir durante su vida, es sólo una herramienta. Para lograr la felicidad, es necesario utilizar esta herramienta con prudencia.
Al final del día, el dinero puede comprar la felicidad, pero no garantiza la felicidad, porque algunos pueden desperdiciar dinero y tiempo.
¿Puede una persona pobre ser feliz? ¡Claro que sí! ¿Y una persona rica puede ser infeliz? ¡Por supuesto! Sin embargo, nin
guna de estas situaciones descarta mi tesis. Después de todo, la felicidad no sólo viene del dinero y el dinero no te garantiza la felicidad.
guna de estas situaciones descarta mi tesis. Después de todo, la felicidad no sólo viene del dinero y el dinero no te garantiza la felicidad.
Pero el dinero es tiempo y directa o indirectamente puede comprar la felicidad.
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